Papeles de Cultura Contemporánea, Núm. 25, 2022
Procesos de artificación de la artesanía
Universidad de Granada
Nacida en Pedrera (Sevilla, 1985), actualmente se encuentra afincada en Granada. Desde su infancia soñaba con la creación de objetos que sus manos daban forma a través materiales naturales como el barro, las ramas o cualquier elemento natural que encontraba a su alcance. Adoptó a la naturaleza como su cómplice en sus juegos y se convirtió en un modo de interactuar. Esta, como le es propio, le aportaba los materiales, le daba el espacio y le servía de refugio a su mundo creativo. Hoy en día sigue dando formaa sus ideas y sueños a través de elementos naturales, con toda su fuerte carga simbólica, como la cera de abeja, las raíces, el papel de arroz, el hilo de seda, el barro, etc. desarrollando un trabajo caracterizado por una gran pureza y austeridad formal.En contraste con la pobreza y fragilidad del material, sus piezas tienen cualidades perdurables y eternas, que se ha ido nutriendo de influencias de la filosofía y la religión oriental, el minimalismo y el land art. Suscitando un encuentro entre arte, naturaleza y espiritualidad, aludiendo a la trascendencia y belleza de las cosas que son a la vez sencillas y esenciales para la vida diaria.Como ha señalado Semiramis González: «Segura es una artista de procesos, donde es tan importante lo que vemos (…) como el desarrollo de cada uno de los elementos que tenemos delante; su realización previa.Así́, las decenas de hilos que componen sus obras son elaborados artesanalmente por la artista a partir de sumergir hilo de algodón en cera de abeja y pigmento natural. La utilización de materiales naturales nos sitúa en el lugar de lo simbólico, aludiendo de nuevo a esas artistas que han apostado por la cercanía de lo orgánico, por tocar las obras y formar parte esencial en su elaboración.La inmensa extensión de hilos que conforman algunas de sus obras implica, asimismo, un ritual procesual para su realización, donde la repetición es constante, construyendo uno a uno cada centímetro de hilo, dándole forma, dándole color. Esta letanía alude también a la historia personal de la artista, que recuerda a su madre y a su abuela cuando trabajan así. La idea de repetición era protagonista cuando ambas mujeres cosían, pasando el hilo por la tela con la aguja una y otra vez. De nuevo, en esos espacios íntimos de trabajo constante las mujeres han encontrado lugares de evasión, a menudo menospreciados como artes menores pero que han sido caldo de cultivo de pequeñas revoluciones. (…)En este sentido, Segura hace un ejercicio de apertura absoluta al público, mostrando no sólo este proceso sino las herramientas de las que se sirve para el resultado final (…). Esta alusión, nuevamente, a elementos naturales como la madera, se conforman como un proyecto conjunto que se materializa en sus piezas pero cuyo eje central continuo es la cercanía con los elementos no artificiales.(…) La obsesión por los materiales naturales y la fuerte carga simbólica que estos albergan van de la mano de referencias metavisuales en su trabajo; si aludíamos antes a ese vacío con sentido propio, nuestro papel como espectadores cumple también una función de acabar lo inacabado. Aquí́ el vacío está cargado de densidad.»1
1Laura Segura: cuando lo natural llena el vacío. Semíramis González. Texto catálogo. Sala Ático. Palacio de los Condes de Gabia. Diputación de Granada. Del 17 de diciembre al 6 de marzo 2022.